Protegiendo a NPH México de la Segunda Ola de Covid-19

16 Abr 2021

Daniel Zapata, Linette Gomez y Nicholas Rogers

NPH-México tiene dos de sus cuatro casas en el estado de Morelos; una en la ciudad de Cuernavaca, en donde viven los adolescentes que estudian el bachillerato y otra en el poblado de Miacatlán, en donde viven niñas y niños que estudian desde preescolar hasta secundaria. Al igual que otros estados de la República Mexicana, el estado de Morelos se ha visto afectado terriblemente por el incremento de casos y defunciones a causa de la pandemia del COVID-19.

En México se ha establecido un semáforo de riesgo epidemiológico para transitar hacia una nueva normalidad, es un sistema de monitoreo para la regulación del uso del espacio público de acuerdo con el riesgo de contagio. El nivel más alto del semáforo se muestra en color rojo, que es cuando la ocupación hospitalaria es mayor a 65% o dos semanas de incremento en los casos de contagio. Durante el semáforo rojo, únicamente se permiten las actividades económicas esenciales, se exhorta a la población a permanecer en casa, salir sólo para realizar actividades necesarias portando de manera obligatoria un cubrebocas (en la ciudad de Cuernavaca se establecieron sanciones económicas a las personas que no lo usen) y mantener el distanciamiento social.

El estado de Morelos estuvo en semáforo rojo del 24 de diciembre de 2020 al 15 de febrero del 2021, un poco más de 7 semanas. Durante este tiempo, las empresas y el comercio vieron mermada su economía debido al confinamiento prolongado que ha ocasionado el cierre total y parcial de varios establecimientos mercantiles. Durante el cierre del año 2020, la actividad industrial del estado tuvo una variación negativa de -13.5 anual de acuerdo con cifras del INEGI.

ALARMANTE AUMENTO DE CASOS DE COVID EN MORELOS

En cuestión de contagios de COVID-19, estos se multiplicaron alarmantemente debido a las reuniones sociales que se hicieron en la época decembrina y a que muchas personas ignoraron las recomendaciones de prevención, dando como resultado una segunda ola de contagios mucho mayor a la primera reportada en 2020.

A finales del mes de enero, la ocupación hospitalaria rebasaba el 90% de las 160 camas de terapia intensiva disponibles en tres hospitales en el estado de Morelos, y había llegado a una ocupación del 80% en camas generales. La Secretaría de Salud del Estado de Morelos reporta que desde marzo del 2020, hasta el 13 de febrero del presente año, “…se han practicado pruebas a 72,064 personas, de las cuales se han confirmado 24,477 con COVID-19; 2,438 están activas, descartando 45,957 y están como sospechosas 1,630; se han registrado 2,147 defunciones en el estado.”

NPH MÉXICO SE ADAPTA A LA NUEVA CRISIS POR COVID-19

Desde meses atrás, nuestro personal ha usado cubrebocas y careta al momento de trabajar dentro de nuestras casas. Se tuvieron que comprar otros artículos como termómetros, trajes de protección para nuestro personal médico, insumos para prevención del virus como sábanas, colchones, toallas, etc. Como resultado, se gastaron más de $10,000 USD que no se tenían presupuestados. Hoy en día, como medida para fortalecer la prevención de contagios de Covid-19 se ha impuesto el uso de cubrebocas a nuestras niñas, niños y adolescentes dentro de nuestras casas, con esto buscamos seguir disminuyendo riesgos y salvaguardar la salud de toda nuestra población. Hasta el momento se han repartido 420 cubrebocas en nuestra casa de Miacatlán y doscientos en nuestra casa de Cuernavaca. El costo de cada cubrebocas es de $5.50 MXN. ($0.30 USD).

La pandemia por Covid-19 ha impactado el presupuesto de NPH debido al aumento en el precio de alimentos y suministros. El Director Nacional de NPH México, Rafael Bermúdez dice, “hemos añadido el costo de alimentos básicos, productos de higiene y desinfectantes, que usamos en grandes cantidades y que han aumentado su costo considerablemente. Por ejemplo, el costo del huevo ha aumentado aproximadamente 20% en buena parte del país. Como se esperaba, las personas están comprando suministros médicos y de limpieza, alimentos y otros productos en grandes cantidades. Por lo tanto, debemos estar preparados considerando el tamaño de nuestra población, con más de 400 niños y niñas solamente en Miacatlán.”

Imposible bajar la guardia ante un panorama desalentador con una curva alta de contagios, por tal motivo NPH México está solicitando apoyo para la compra de los siguientes materiales.

  • Maquina concentradora de Oxigeno – AIRSEP 10 lts
  • Estación de Higiene Respiratoria
  • Dispensadores de Gel Sanitizante
  • Pruebas PCR para Covid-19
  • Pruebas de anticuerpos para Covid-19
  • Cubrebocas de tres capas
  • Goggles
  • Cajas de guantes no estériles
  • Termometro Infrarrojo K3 con TRIPIE
  • Detector Instantáneo de Temperatura Digital
  • Multivitamínicos (botellas con 100 caps)
  • Poster de información preventiva sobre COVID-19 (127 cm X 88.9 cm)
  • Monitor Digital de Detección de Signos Vitales

Prevenir el Covid-19 en las casas de NPH es un reto. El cuidado básico requiere pruebas rápidas, equipo de protección para el personal, equipo de monitoreo, gel antibacterial y desinfectantes, medicamentos, vitaminas y un seguimiento cuidadoso de los pacientes y grupos de alto riesgo. Además, NPH México promueve estas medidas preventivas y consejos a través de pláticas, murales y posters en sus casas. Esto sirve durante la pandemia, pero además para prevenir otras enfermedades.

El Departamento de Psicología mantiene un monitoreo de nuestros niños y adolescentes para detectar problemas de salud mental debidos al confinamiento que han llevado, ya que para marzo de este año habrán cumplido un año.

Se ha mantenido contacto con los familiares de los niños y jóvenes para avisarles que se encuentran bien de salud y protegidos de la pandemia, de esto se ha encargado el Departamento de Trabajo Social.

El esfuerzo para proteger a nuestros niños y jóvenes deber seguir y fortalecerse cada día, no sólo en nuestras casas en el estado de Morelos, sino también en las otras dos cosas ubicadas en el norte de México.

“Nos gustaría agradecer a nuestros donantes y padrinos por el amor y apoyo que le han dado a la familia de NPH México durante esta crisis. Este es un momento difícil para todos, con muchas personas teniendo que hacer sacrificios personales y financieros. Cualquier ayuda que puedan darnos será muy apreciada. Pedimos a Dios por su salud, como ustedes piden por nuestros niños. Que Dios los bendiga,” concluye Rafael Bermúdez, Director Nacional de NPH México.